
Los gases contaminantes son los principales enemigos del medioambiente ya que aceleran la subida de las temperaturas, el cambio climático y la contaminación. Además, su emisión en algunos casos puede acarrear multas muy elevadas. Por esta razón, el sistema de lavado de gases es una opción muy interesante para un gran número de industrias y fábricas.
Es una forma sencilla de transformar el aire contaminado en aire apto para formar parte de la atmósfera. Esto lo consigue usualmente con un líquido especial que en pequeñas cantidades es capaz de transformar grandes cantidades de gases, por lo que es un sistema muy eficiente y poco costoso.
¿Qué es un sistema de lavado de gases?
Un sistema de lavado de gases es una solución efectiva al problema de la emisión de gases por parte de algunas empresas. Es un conjunto de técnicas, conocimientos y herramientas dispuestas para transformar los gases contaminantes en aire limpio.
Un sistema de lavado de gases siempre cuenta con un elemento principal, el scrubber. Alrededor de él hay todo un proceso para que funcione correctamente.
¿Qué es un scrubber o lavador de gases?
El lavador de gases o scrubber es un aparato que elimina los componentes dañinos de los gases y puede hacerlo de dos formas:
- Por impacto inercial: reacción del contaminante con un agente químico.
- Por absorción física: por un disolvente líquido.
Estos instrumentos suelen ser muy estándar pero también hay modelos específicos para tipos de gases menos comunes en las industrias, por lo que requieren un diseño especial.
¿Cuál es el funcionamiento de un lavador de gases?
En Sotecma nuestro sistema de lavado de gases funciona mayormente por absorción física. Es decir, su objetivo es separar las partículas dañinas del aire y para ello utiliza un líquido que las absorbe.
Para ello, debe existir una corriente de gas y también, un líquido llamado líquido de lavado, el cual consigue que determinados componentes gaseosos se disuelvan y queden en el líquido, que suele ser una solución a base de agua.

Así funciona un lavador de gases industriales, pero como sistema ocupa 4 fases diferenciadas, todas ellas son clave. Las 4 fases del sistema de lavado de gases son: lavado, absorción, separación y recuperación del gas.
El scrubber es capaz de llevar a cabo todos estos pasos de una forma automatizada y totalmente controlada. Pero antes de que se inicie el proceso es importante seleccionar correctamente el líquido que se va a utilizar. Puede ser una solución de agua, de aceite, una solución alcalina u otros.
Luego, el tipo de scrubber o lavador de gases también es importante ya que el funcionamiento de cada uno de ellos es similar pero no idéntico. Aunque en general se encargan de: la concentración de gases, la entrada y salida de gases, la presión, temperatura y otros.
Conclusión sobre el sistema de lavado de gases en la actualidad
Un sistema de lavado de gases de calidad y automatizado es un elemento imprescindible para cualquier empresa que pueda verter gases contaminantes a la atmósfera y quiera evitar una multa estatal.
Es además, una solución eficiente y sencilla al problema de la contaminación y del efecto invernadero.
Su sistema de funcionamiento consiste, generalmente, en un líquido seleccionado cuidadosamente capaz de absorber los gases contaminantes. Una vez quedan en el líquido, estos se deben separar y eliminar por completo.
Así, los gases que quedan en la planta productiva o de la fábrica no resultarán dañinos y además, no habrá peligro de que lleguen a la atmósfera pues en su composición ya no existen partículas contaminantes.